Tengo recuerdos de Mara Wilson en el papel de Matilda. Asi que me costó bastante encariñarme con esa nenita dibujada en mi Kindle a medida que leía. Sin duda,la película es una gran adaptación de este clásico (los trajes y las descripciones de Trunchbull y Wormwood son increiblemente parecidos a los elegidos) que tiene un gusto agridulce desde el comienzo. La protragonista es una nena de 5 años, terriblemente incomprendida y descuidada por sus padres. Bueno, contrariamente a lo que se podría esperar, Matilda es brillante incluso en esas circunstancias de la vida que le tocaron ( dos circunstancias que me hicieron querer tirarles con macetas desde el inicio). Avida aprendiz y observadora, transcurre sus días imaginando un universo distinto para ella y,lo que es más genial aún, leyendo todo lo que puede e imaginando otros universos en donde es posible ser feliz. La ternura de esta nena no tiene límites y por eso mismo la mediocridad de los padres es aún más indignante.
No obstante, el libro es hermoso y en mi caso me encantaron las pequeñas ilustraciones que acompañaban cada capítulo. Una buena opción para sentirse chico otra vez.
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